Qué idea tan encantadora! Una tarta de vino rosado y fresas combina sabores frescos y sofisticados. Aquí tienes una receta para hacer una tarta deliciosa con estos ingredientes.
Ingredientes:
Para la base:
- 200 g de galletas digestive o galletas tipo María
- 100 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
- 250 g de fresas frescas (más algunas para decorar)
- 250 ml de vino rosado
- 200 g de queso crema (tipo Philadelphia)
- 200 ml de nata para montar
- 150 g de azúcar
- 3 huevos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 2 cucharaditas de gelatina en polvo (o 4 hojas de gelatina)
Para la cobertura (opcional):
- Mermelada de fresas o gelatina de fresas
- Hojas de menta fresca (para decorar)
Instrucciones:
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Preparar la base:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F).
- Tritura las galletas en un procesador de alimentos o con un rodillo hasta obtener migas finas.
- Mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que estén bien combinadas.
- Presiona la mezcla de galleta en el fondo de un molde para tarta (de unos 23 cm de diámetro) y compacta bien. Puedes usar el dorso de una cuchara para hacerlo.
- Hornea la base durante 10 minutos y deja enfriar.
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Preparar el relleno:
- Lava y corta las fresas en trozos pequeños. Reserva algunas para decorar.
- Si usas gelatina en polvo, disuélvela en un poco de agua caliente según las instrucciones del paquete. Si usas hojas de gelatina, hidrátalas en agua fría y luego disuélvelas en un poco de agua caliente.
- En una cacerola, calienta el vino rosado a fuego medio hasta que se reduzca a la mitad. Deja enfriar.
- En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
- Añade la nata para montar y el extracto de vainilla a la mezcla de queso y azúcar. Bate hasta que esté bien combinado.
- Incorpora el vino rosado reducido a la mezcla.
- Agrega la gelatina disuelta y mezcla bien hasta que esté completamente integrada.
- Incorpora las fresas picadas en la mezcla.
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Montar y enfriar la tarta:
- Vierte el relleno sobre la base de galleta ya enfriada y alisa la superficie con una espátula.
- Refrigera la tarta durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que se asiente bien.
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Preparar la cobertura (opcional):
- Si deseas una capa de mermelada, calienta un poco de mermelada de fresas y unta sobre la tarta antes de servir. Alternativamente, puedes preparar una gelatina de fresas siguiendo las instrucciones del paquete y verterla sobre la tarta.
- Decora con las fresas reservadas y unas hojas de menta fresca.